Hoy, después de unos meses ya, hemos tenido la suerte de volvernos a encontrar… Esta vez en un sitio distinto, también rodeado de lluvia, pero ahora en nuestra casa. Gracias Leda y Diego por vuestra visita y por dejarnos ir a Granada, para disfrutar de ella, de sus gentes, sus grandes lugares y sus pequeños rincones, de su clima pasado por agua…
Que bonito y gratificante resulta ver como después de estos meses, al ver este pequeño pedacito de vuestro día, se os escapen unas lágrimas. La mejor recompensa a nuestro esfuerzo..
Que sigais siendo muy felices…
Nos volveremos a ver…